Hemos hablado muchas veces de lawrence
de la cópula infinita de sus tortugas
del impulso lento y anfibio de su sexo
de lo que hace su existencia algo mejor
que la nuestra
pensad que sería de un mundo colonizado
por miles de millones de tortugas
por su olor intenso y su color agradable
la lentitud que recorrería
sus colonias de barro y playa
el lento decoro de sus aviones
lo amoroso de sus crías
su organización sin tribunales
hemos hablado muchas veces, sin saberlo,
de lo bien que le iría al mundo
si los humanos, estos humanos,
amasen lentamente,
como tortugas.