Yo una vez tuve patria hermosa –
así cantaba Heine el fugitivo.
La suya estuvo junto al Rin,
la mía en tierra de La Marca .
Todos tuvimos una (¡ver arriba!)
que consumió la peste, que se ha desmoronado
Oh rosa de los páramos pequeña,
te ha tronchado la Fuerzaporelocio .
Los ruiseñores han enmudecido,
buscan una guarida más segura,
y sólo buitres gritan
por encima de hileras de sepulcros.
Nunca será de nuevo lo que fue
aunque cambiara,
aunque sonara la campana amada
y no vibrase más espada alguna.
Ocurre a veces que me siento
como si el corazón se me rompiera.
Tengo nostalgia algunas veces
y yo no sé de qué.